La importancia de la lectura en los niños

Con motivo de la reciente celebración de Sant Jordi, desde el blog de vigilabebes.es queremos dedicar uno de nuestros artículos a la importancia de educar a nuestros hijos en la lectura. El hábito de la lectura es muy importante para el desarrollo de nuestros hijos por lo que es necesario motivarlos para conseguir aficionarlos.

Enseñar a los niños la importancia de la lectura les abre las puertas de la información, de la cultura, de la fantasía etc. y aporta grandes beneficios a la hora de estudiar y aprender nuevos conocimientos. El papel de los padres en esta actividad es fundamental.

Desde bien pequeños hay que poner en contacto a los niños con los libros y cuentos (con grandes imágenes y poco texto). A partir del primer año es el momento recomendado.  Poco a poco, con el paso del tiempo, es importante ir incrementando el nivel de dificultad de los libros, a medida que el lector vaya creciendo.

A corto plazo la lectura permite:

  • Enriquecer la relación adulto-niño: en el momento en el que mamá o papá leen un cuento para su hijo, se crea un ambiente mágico y de unión niño-adulto-libro único. Los padres deben contar el cuento de manera que el niño no pierda el interés.
  • Familiarizar al niño con los textos, lo que le proporcionará una ventaja al niño cuando llegue al colegio, ya que leer le parecerá una actividad necesaria e interesante.
  • Que el niño vaya descubriendo cosas nuevas y conocerse así mismo.
  • Desarrollar las capacidades mentales del niño (memoria, lenguaje, capacidad de abstracción, imaginación).

Recomendaciones a seguir a la hora de introducir a los niños en la lectura:

  • Que los libros sean acordes a la edad del niño y sus capacidades.
  • Elegir aquellos libros que sabemos que les gustan, por ejemplo sobre animales, princesas…o incluso dejar a los niños que sean ellos mismos los que elijan que es lo que quieren leer. No importa si son libros, revistas o cómics. La calidad es lo importante.
  • Es conveniente seguir leyéndole los textos, porque su lectura es dificultosa y lenta y puede acabar cortando la comunicación. La cita periódica y puntual con la lectura-placer es muy positiva.

  • Que el niño vea que los mayores también leen.

  • Leer todas las noches un poquito antes de acostarse. Siempre motivándolo, no como una obligación. Una rutina que puedes comenzar incluso antes de que aprenda a leer, leyéndole tú un cuento, para que desde niño empiece a entrarle el gusanillo por la lectura.