Todos los papás y mamás del mundo, tras la llegada del bebé, sólo sueñan con dormir unas cuantas horas seguidas. El nacimiento de un hijo desestabiliza esas horas de sueño tan necesarias para el descanso de los “papis”. Por ello, queremos indicaros las pautas recomendadas para conseguir que nuestro hijo duerma las horas necesarias y evitar los despertares nocturnos.
Para que el niño concilie el sueño, lo más recomendable es seguir una rutina de “buenas noches”: tomar el baño (de gran ayuda para conseguir la relajación), ponerse el pijama, cenar, leer un cuento en la cama etc. Seguir costumbres favorece a que los más pequeños se sientan seguros y consigan un sueño tranquilo y relajado.
A parte de estas rutinas, utilizar una luz quitamiedos, que exista silencio, hablar bajito, poner música clásica, utilizar un peluche o gasa para dormir etc. Ayudan a un descanso placentero y saludable.
- Entorno tranquilo: antes de dormir es necesario crear un ambiente relajado, sin televisión, sin ruidos, sin voces ni enfados, ya que de esta manera generamos un estado de calma favorable al sueño del bebé. En cambio, si generamos una situación de ruido, lo que estamos consiguiendo es excitar al pequeño y que quiera salir de su cuna o cama.
- Temperatura y humedad: la temperatura debe situarse entre 18 y 20ºC y la humedad entre el 30 y 50%. Estos factores son fundamentales para que el pequeño pueda descansar sin cambios de temperatura que provoquen su enfriamiento o sudor provocando que se despierte e incluso que se resfríe.
- Luz quitamiedos: es un elemento muy recurrente durante la noche. Debe ser de baja intensidad. Este piloto de luz hace que los niños venzan sus miedos a la oscuridad y les de confianza. Además, ayuda a los papis a controlar a los “peques” sin necesidad de encender las luces y molestarlos.
- Ropa de dormir adecuada: esta debe ser la apropiada a la estación del año en la que nos encontremos. Es importante este factor, ya que si los abrigamos en exceso o no, provocaremos cambios de temperatura no deseados.
- Cuna/cama apropiada: sabanas, colchón, almohada etc. todo de material de calidad, que permitan un descanso cómodo y saludable.
Desde www.vigilabebes.es, esperamos que pongáis en práctica todos estos consejos para ayudar a los más pequeños a que tengan un sueño relajado y de calidad.